Los dibujos animados están dirigidos en gran parte a
los niños y es por esto que el lenguaje utilizado es más comprensible para los
extranjeros. La mayoría de los dibujos animados son simples: tienen historias sencillas
con un problema y una solución, por lo que el hilo argumental y, por extensión,
el lenguaje empleado es fácil de seguir. Los verbos que se utilizan son comunes
– refiriéndonos con comunes a muy utilizados en la vida cotidiana – y lo mismo
sucede con el léxico. Como hemos dicho, la audiencia a la que va dirigida este
tipo de género es la infantil y es por eso por lo que el lenguaje es
deliberadamente sencillo. Aún así, puede que alguna palabra no se entienda
pero, si esto sucede, el espectador será capaz de suplir esa falta visualmente con
el desarrollo de la historia.
Ver
dibujos animados como extranjero es una forma divertida de aprender un idioma
nuevo y ayuda, sobre todo, a la adquisición de nuevo vocabulario y a la mejora
de la comprensión auditiva. Algunas
palabras pueden ser útiles y otras puede que nunca tenga que utilizar, pero la
adición de nuevas palabras como estudiante de idiomas es siempre positivo.
La mayor parte de los
dibujos animados populares en España en este momento son importados,
principalmente de Estados Unidos y Japón. Por lo tanto, la mayoría de los
diálogos que encontramos están doblados y/o subtitulados en español. No
obstante, es complicado mantener el tono original y el efecto del diálogo
porque el doblaje de un programa no es siempre igual de una idioma a otro. A menudo la formulación –y algunas veces también el contenido de un guion– pueden
ser alterados para mantener el sentido original. Para ello hace falta que el
traductor tenga un conocimiento muy amplio de ambos idiomas, así como una clara
noción del ritmo de ambas lenguas. La adaptación del guion es muy importante,
pues la traducción literal suele ser inviable o, cuanto menos, mala. Es importante,
por otra parte, captar bien el argumento y los matices del contenido original
para reflejarlos adecuadamente en la traducción mediante los procedimientos que
ofrece la lengua receptora (expresiones,
juegos de palabras, referentes…).
As a tropical island, as a tropical island. As a
tropical island, as a tropical island; On a tropical island, underneath a
molten lava moon. Hanging with the hula dancers asking questions cos they´ve
got all the answers; Putting on lotion, sitting by the ocean, rubbing it
on my body, rubbing it on my body;Get me out of this cave, cos it´s nothing but a
gladiator grave. And if I stick to the plan, I think I´ll turn into a
lava-man. I think I´ll turn into a lava-man.
Una isla muy chachi, una isla muy chachi, una isla
muy chachi, una isla muy chachi; En la isla muy chachi, bajo una luna que es
guachi, bailando con las chatis que no me dejan ni un rato tranqui; Yo me pongo la crema sentado en la arena, por mi
cuerpo serrano, el cuerpo del verano; Sácame de este agujero, porque odio los esqueletos; Y si sigo tu plan, yo me convierto en lava-man, yo me
convierto en lava-man.
Como una isla tropical, como isla tropical, como una
isla tropical, como isla tropical; En una isla
tropical, bajo la luna de lava derretida, con los bailarines de hula pregunto
por que ellos tienen la respuesta; Frotándome la lava me acuerdo mucho de ti; Quiero salir de la cueva, porque solo es una tumba
de gladiador, si; Y si me apego al plan, me convertiré en hombre de
lava si, si, si. Me convertiré en hombre de lava.
Como podemos ver, la versión latinoamericana es casi una traducción literal del original aunque parece que pierde la mayor parte de la comedia y el ritmo del inglés. Por otro lado, la versión castellana es tan diferente a la original que el lenguaje utilizado sería difícil de entender a menos que se trate de un hablante nativo. Por ejemplo, es complicado que un extranjero entienda “guachi” o “chati”; en cambio, la versión latina, ofrece la traducción literal “isla tropical”, mucho más asequible.
También, dentro de la versión en castellana, se hacen más adaptaciones
para la fácil identificación y conexión con la audiencia. Así pues, aunque la
versión castellana es más difícil de entender, conserva definitivamente la
sensación y el humor del original, algo que la versión latinoamericana deja de
hacer.
Y tú, ¿qué crees que es más
conveniente: mantener el sentido original o conservar el ritmo y juego de humor
de cada lengua?
Creo que a la hora de traducir es fundamental tener en cuenta al receptor de la traducción. En principio, esta serie de dibujos animados va dirigida a un público adolescente y adulto, pero también resulta muy atractiva para el público infantil. La serie ha sufrido la censura con el fin de hacerla apta para los niños, por lo tanto, si existe esta censura es porque el público infantil es un consumidor importante de esta serie. Por ello, creo que la versión peninsular está muy conseguida. Mantiene el ritmo y el humor del original, el mensaje no es muy diferente y además tiene un lenguaje fluido y natural que un niño podrá entender con facilidad. Este no es el caso de la traducción latinoamericana, cuyo lenguaje resulta forzoso y pesado y tiene un sentido un poco difuso. Hay que estudiar todos los casos, ya que tampoco es bueno darle a los niños demasiadas facilidades ya que tienen que aprender. Pero en este caso, no creo que la versión latinoamericana vaya a enseñarles algo a los niños, sino más bien lo contrario. Por otro lado se habla de que la versión latinoamericana puede tener más facilidades para estudiantes de la lengua española, eso es totalmente cierto, pero debemos recordar que el receptor modelo de esta serie no es un estudiante de español. Si en un caso hipotético fuera así, me inclinaría hacia la versión latinoamericana, hacia la traducción literal, aunque en contrapartida, diría que no se les está enseñando un lenguaje natural a los estudiantes extranjeros de español.
ResponderEliminarEnhorabuena por el trabajo que estáis realizando, es un blog muy interesante.